RESTAURNTE ALABASTER

A lo largo de su desarrollo perpendicular a la calle, nuestro local se encuentra cortado transversalmente hasta seis veces por unos potentes muros de carga estructurales, apoyo de las fachadas y patios del edificio. Estos muros, de granito en sillares ó mampuestos, ó bien de ladrillo cerámico macizo en algunas zonas, condicionan fuertemente la distribución y uso de los espacios.

 

Con la voluntad de rescatar el espacio y la memoria del local, la propuesta opta por eliminar los revestimientos que en la actualidad cubren las paredes, bajan los techos y enmascaran los muros. La indudable fortaleza y potente textura de estos últimos, dota al conjunto de carácter y personalidad.

 

Son también ellos quienes definen la sucesión de espacios, desde los más públicos junto a la calle, hasta los más privados al fondo del local. La cava cobra especial relevancia para potenciar su atractivo visual, situándose en un recinto acristalado central. Aseos y cocinas se reorganizan para situarse de manera adecuada a su función.

 

Los nuevos techos acústicos, se elevan y unifican tanto como sea posible para aumentar la amplitud espacial. Igualmente son continuos los suelos de piedra oscura apomazada. El color negro del suelo y el del techo, contrastan con el blanco de muros y paredes que unifica el conjunto respetando texturas. Muebles auxiliares de madera natural ó cuero rematan un conjunto elegante y acogedor.